Las carcamusas es uno de los platos más típicos de la cocina tradicional toledana, y que según la tradición se originó a mediados del siglo XX en el Bar Ludeña, situado en la plaza de la Magdalena, y que hoy en día continúa ofreciéndolo siguiendo la receta original.
Afirma la tradición que su creador, José Ludeña, dio nombre a su creación por un juego de palabras de sus principales clientes. Principalmente se trataba de hombres de edad avanzada (carcaz), y varias señoritas jóvenes a las que consideraban sus musas. Como este plato era del agrado de ambos no tuvo duda en denominarlo carca-musas.
Principalmente se traba de carne de cerdo guisada con verduras de temporada, como guisantes, ajo, cebolla, pimiento… Y todo presentado a modo de tapa en una pequeña cazuela de barro con algunas rebanadas de pan.
Y aunque el origen de la tapa data del citado bar, no resulta difícil encontrar la misma receta en muchos otros establecimientos de la capital toledana.